El nuevo acuerdo ayudará a fortalecer el control de Chanel sobre las cadenas de suministro de cuero. La marca de lujo francesa ya ha realizado acuerdos similares en el pasado, escribe Worldfootwear.com.
El acuerdo entre las empresas no cambiará la estructura organizativa de la curtiduría, sus líderes seguirán siendo los mismos: Chicca Miramonti y Raffaele Mosconi. Fundada en 1946, la fábrica conservará a sus antiguos clientes.
Hace un año, Chanel adquirió una curtiduría en Toscana especializada en la producción de cuero estampado. Estos acuerdos ayudan a fortalecer el control de Chanel sobre la cadena de suministro. Siguen las adquisiciones en 2018 del 100% del grupo español Colomer Leather Group, especializado en piel de ovino, y en 2016, del 50% de Mégisserie Richard, especializado en pieles de cordero. En 2013, Chanel compró Bodin Joyeux, en 2012 la fábrica de guantes Gausse y tomó el control de las curtidurías francesas Tanneries Haas.
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